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domingo, 18 de marzo de 2018

Aporia crataegi

Es una mariposa de gran envergadura alar de hasta 60 mm, cuerpo negro y alas de color blanco, tanto en el anverso como en el reverso, con numerosas venas negras, tendentes a color marrón en las hembras, que forman una retícula característica. Es frecuente en huertos, caminos, jardines y prados, especialmente en la media montaña y dondequiera que existan las plantas que les sirven de alimento: plantas cuyas flores son ricas en néctar. Forma colonias diferenciadas que fluctúan mucho en número de individuos.

Tiene una generación cada año. Los adultos son visibles en el mes de junio y perduran hasta agosto.  Los huevos se depositan en hileras muy apretadas, en lotes de entre 100 y 200, generalmente en la parte inferior de una hoja que servirá de alimento a las larvas (frecuentemente Prunus spinosa, Crataegus monogina, Sorbus aucuparia y Pyrus sp.). Los huevos son de color amarillo brillante cuando están recién puestos, oscureciéndose después de unos días. Los huevos eclosionan en 2 a 3 semanas, dependiendo de la temperatura.

La larva se come la mayor parte de su cáscara de huevo al eclosionar antes de unirse a una red larval comunal. Los grupos de larvas salen de su refugio para alimentarse, la una al lado de la otra, pero regresan  cuando aún son muy pequeñas durante el invierno. Hasta la primavera, las larvas continúan este patrón de vida en comunidad, y continúan forrajeando en grupos. Las larvas son particularmente sensibles y se dejan caer de la planta si se las molesta. A medida que las larvas crecen, tienden a formar grupos más pequeños que forman subcomunidades, cada grupo crea su propio refugio en el que permanecen. En última instancia, se abandona el comportamiento gregario y las larvas completamente desarrolladas se dispersan para alimentarse individualmente antes de la pupación. La pupa aparece en mayo. Está unida al tallo de la planta  por una faja de seda y es a menudo bastante visible y fácil de encontrar. Esta etapa generalmente dura alrededor de 3 semanas, dependiendo de la temperatura.

Una característica interesante de esta especie es que la hembra, frotando sus alas una contra la otra, pierde muchas de sus escamas, lo que resulta en una apariencia casi transparente en comparación con las alas blancas del macho. El propósito de este comportamiento sigue siendo un misterio.

Es muy común en todo el continente europeo hasta Escandinavia, aunque se extinguió en las islas británicas de forma extraña, ya que las plantas que les sirven de alimento son muy abundantes. También está presente en el Noroeste de África y zonas templadas de Asia.