El ciervo volante, es uno de los escarabajos más carismáticos. Ampliamente distribuido, es el escarabajo saproxílico más grande de Europa. Las poblaciones de esta especie habitan bosques caducifolios maduros, especialmente los bosques de robles de tierras bajas y de altitud media que tienen madera muerta podrida a nivel del suelo.
Los adultos miden aproximadamente entre 25 a 50 mm, en el caso de las hembras; aproximadamente entre 30 a 90 mm los machos, incluida la longitud de la mandíbula. El color varía de marrón rojizo a marrón muy oscuro, casi negro. Con frecuencia, los machos exhiben élitros y mandíbulas rojizas que contrastan con el color oscuro de las otras partes del cuerpo, aunque los especímenes más pequeños son de color más uniforme y negruzco. El palo antenal exhibe cuatro (o más raramente cinco) antenómeros. La especie exhibe un fuerte dimorfismo sexual: el macho tiene mandíbulas grandes, más largas que su cabeza, mientras que la hembra tiene mandíbulas mucho más cortas. La disposición de vuelo es característica: los machos, y principalmente los "mayores", con grandes mandíbulas, mantienen el cuerpo cerca de la posición vertical para equilibrar el peso de la cabeza y vuelan lentamente en líneas rectas con variaciones de altura; las hembras, caracterizadas por una cabeza pequeña armada con una mandíbula corta, mantienen el cuerpo mucho menos vertical. El despegue requiere una posición en altura sobre el suelo, como desde el tronco y las ramas de árboles o arbustos
Los machos más pequeños muestran mandíbulas muy variables, generalmente menos curva dorsoventralmente, más gruesas, con dientes apenas delineados y una cabeza sin bordes basales prominentes, mientras que los machos más grandes exhiben mandíbulas menos variables: delgadas y equipadas con dientes medianos completamente desarrollados y bifurcaciones apicales profundas y divididas, sostenidas por bordes basales en su ancha cabeza.
Los imagos generalmente emergen del suelo en mayo, los machos aproximadamente una semana antes que las hembras. Esto está influenciado por el clima local. En España, región de Asturias, se han avistado adultos desde la segunda quincena de junio a la primera quincena de septiembre, para la región ibérica central (Sierra de Guadarrama), se han reportado datos desde principios de junio hasta la segunda parte de julio. Los adultos son principalmente activos al anochecer y hay un pico estacional de actividad, relacionado con el enjambre nocturno de machos que buscan hembras para aparearse. Cuando más de un macho detecta a una hembra, pelean entre ellos. Si el tamaño corporal de los machos es una ventaja en una pelea, no siempre es el caso en el éxito del apareamiento. De hecho, el éxito del apareamiento depende de la proporción de tamaño corporal “macho/hembra” (valor óptimo: 1,4) ya que los machos más grandes a menudo no pueden reproducirse con las hembras. Después del apareamiento, la hembra excava una galería profunda (hasta 70-100 cm) en el suelo, cerca de sustratos adecuados para el desarrollo larvario (por ejemplo, raíces de árboles, madera podrida). El tamaño de la puesta es de unos veinte huevos. Las hembras pueden realizar más rondas de oviposición, produciendo un total de 50 a 100 huevos y pueden elegir sitios de anidación adicionales. Las hembras liberan una secreción cerca de los huevos, alojada en una estructura llamada mycangium. La secreción contiene levadura que será ingerida por las larvas durante su primera comida: de esta manera, las larvas adquieren levadura para la digestión de la madera. Después de la última oviposición, la hembra no vuelve a emerger del suelo sino que muere in situ.
La duración de la vida larvaria es variable, entre uno y cinco años, según los autores. Las larvas se alimentan de madera en estado avanzado de descomposición, que se encuentra a nivel del suelo, por ejemplo, debajo de tocones y troncos caídos o entre las raíces de árboles muertos en pie, por lo que no son propiamente xilófagas sino saproxilófagas. Un hábitat masivo adecuado puede ser explotado por varias generaciones de larvas durante varios años, hasta su completa desintegración. Los machos adultos tienen una vida muchos más corta, tan sólo de quince días a un mes.
Las plantas hospedadoras de las larvas pertenecen a los géneros Quercus, Fagus, Salix, Populus, Tilia, Aesculus, Ulmus, Pirus, Prunus y Fraxinus, pero también a Castanea, Alnus e incluso Pinus. Está ampliamente distribuido por toda Europa, llegando hacia el norte a las áreas más al sur de Gran Bretaña y Suecia, y hacia el sur a las partes del norte de la Península Ibérica, las regiones centrales de la península italiana, el continente griego y Anatolia. En la sierra de Guadarrama, límite sur de la distribución de esta especie, parece alcanzar una mayor altitud: 1.500m aproximadamente, asociada a formaciones boscosas de diversas especies de Quercus: Q.pyrinaica, Q.ilex y Q.suber.
El ciervo volante se ve amenazada principalmente por la disminución de la edad media de los árboles en los bosques, que se debe principalmente a la gestión intensiva y la sobreexplotación, especialmente en Europa del Este. La consecuencia de esto es la pérdida de madera muerta de los bosques y de árboles viejos que son los hábitats necesarios para que la especie complete su ciclo de vida.
