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sábado, 3 de octubre de 2015

Chrysis ignita


Esta avispa raramente alcanza los 12 milímetros. La cabeza y el torax son de color verde azulado muy brillante, el abdomen rojo-fuego. Los días de sol, sus colores metálicos lucen como los de una gema. Su nombre común en inglés hace referencia a esta característica: "avispa cola de rubi". La parte inferior de su abdomen es cóncava lo que que le permite acurrucarse en una bola para protegerse. Es frecuente observarlas siempre en posición doblada.

Parasita a otros himenópteros. La avispa pone sus huevos en los nidos de otras abejas y avispas solitarias. Preferentemente de aquellas que son recolectoras de nectar y polen. Cuando encuentran un posible nido para poner sus huevos se aseguran primero, escudriñando a través de la entrada, de que no hay otro habitante dentro. Aún si tienen mala suerte y el dueño del nido es otro insecto bien equipado para defenderse, la abeja cuco tiene una dura cutícula cubriendo su cuerpo que le permite protegerse de las picaduras. Si el nido está vacio, comprueban que esté bien surtido de alimentos, y luego se invierten y ponen sus huevos. Para ello disponen de un largo ovipositorio telescópico, que es una derivación del apéndice picador que tienen otras avispas. Por eso esta avispa no pica.Cuando los huevos eclosionan, las larvas viven del stock de alimentos del propietario del nido, hasta que lo terminan, entonces se alimentan de las larvas de la abeja o avispa anfitriona, que matan cuando alcanzan el estado prepupa. Si la avispa anfitriona es capaz de acumular recursos alimentarios suficientes tanto para su prole como para la larva huésped, la avispa parásita puede permanecer sin ser detectada, sin necesidad de matar y comerse a sus hermanos adoptados. Por estas características parasitarias es por lo que se llama "abeja cuco". Las larvas permanecen en el nido hasta que están completamente esarrolladas y luego emergen en la primavera como avispas adultas.

En España pueden verse de abril a septiembre, frecuentemente en brezales y jardines. Su habitat coincide con el de las avispas que parasita, por eso es frecuente encontrarla alrededor de las paredes de ladrillo, suelos secos o cortados desnudos del terreno. Se distribuye por toda la región paleártica, presentándose con mayor frecuencia en la zona central y nórdica. Cubre todo el área ibérica, siendo una especie muy abundante.